Introducción
A fin de justificar la importancia de la Red debemos señalar que, en el año 2022, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se ha propuesto un ambicioso objetivo referente a la adaptación al Cambio Climático y a los fenómenos meteorológicos extremos: “En menos de cinco años, los sistemas de alerta temprana deberán proteger a todos los habitantes de la Tierra frente al Cambio Climático y frente a un tiempo cada vez más extremo”. Para ello, señala que “se debe invertir por igual en adaptación y resiliencia”. Ello incluye potenciar “la información que nos permita prever las tormentas, las olas de calor, las inundaciones o las sequias”. Esta información, se obtiene mejorando la investigación básica relativa a los fenómenos extremos de alto impacto socioeconómico y al clima; uno de los objetivos de la Red y también la investigación relativa a la predicción y observación meteorológica de los riesgos, otro de los objetivos incluidos.
Además, la ONU señala que “en la actualidad, un tercio de la población mundial no cuenta con la protección que brindan los sistemas de alerta temprana”. Por ello, “debemos potenciar la capacidad de predicción” en beneficio de todos. La ONU puntualiza que, para ello, “se deben mejorar los servicios de alerta temprana de peligros meteorológicos y climáticos y las correspondientes infraestructuras de observación invirtiendo 1500 millones de dólares en los próximos cinco años para mejorar los servicios”. Un sistema de alerta temprana de precipitaciones severas, tormentas u olas de calor es un sistema integrado que advierte a las personas de la llegada de condiciones meteorológicas peligrosas.
La ONU describe que “estos sistemas permiten seguir de cerca las condiciones atmosféricas en tiempo real y pronosticar eficazmente los fenómenos meteorológicos y climáticos que se produzcan mediante avanzados modelos numéricos informatizados”. En el informe de 2019 Adapt Now de la Comisión Global de Adaptación, se llegó a la conclusión de que los beneficios derivados de los sistemas de alerta temprana multiplican por más de diez la inversión realizada, lo que constituye el mayor retorno de inversión de entre todas las medidas planteadas. En este informe se señala que “basta con emitir con 24 horas de antelación un aviso de tormenta u ola de calor para reducir los daños consecuentes en un 30%” y puntualiza además que “invertir 800 millones de dólares evitaría pérdidas anuales de entre 3000 y 16000 millones de dólares”. Por tanto, vemos como cobra especial relevancia otro de los objetivos de la Red de investigación como es el potenciar el intercambio de herramientas de predicción y observación meteorológica entre los diversos miembros de la Red con el objetivo de proponer soluciones científicas de alerta temprana y predicción numérica de alta resolución que ayuden a adaptarse al Cambio Climático.